¿PERÚ SIN AGUA?

Amigos(as) ayer domingo 15 en el diario El Comercio se publicó un tema que nos involucra a todos nosotros, porque de no hacerse nada, estaríamos condenados a padecer serios problemas. Como ustedes saben la Tierra se está recalentando debido al incremento del CO2 en la atmósfera y los nevados del mundo entero han empezado a derretirse. La situación del hielo polar es similar, especies como los osos polares, entre otras, tendrían los días contados. El futuro puede ser poco alentador, sin embargo, hay cosas que podemos empezar a hacer. Por ejemplo, en casa, tenemos que enseñar a nuestros niños que no deben tirar la basura en las calles, a conservar y no dañar las áreas verdes que nos proveen de O2, a cuidar el recurso agua utilizando lo necesario solamente al bañarse y lavarse o al regar. Amigos(as) estas acciones pueden parecer insignificantes pero les aseguro que si todos nos comprometemos a realizarlas vamos a lograr un cambio favorable. Cuidar nuestro planeta es TAREA DE TODOS!

A continuación incluyo el artículo publicado en la edición de ayer de El Comercio, ¿Qué les parece?

UN RECURSO QUE SE AGOTA: El Perú es un país sediento. Los nevados se deshielan, las lluvias escasean y la demanda del recurso se incrementa. El futuro es poco alentador. ¿Estamos preparados?

Por Nelly Luna y Martín Huancas
El dios de la nación wanka agoniza. Su piel blanca, eterna, incorruptible ha comenzado a desaparecer para dar paso a un color oscuro y triste. Los hombres han sido los que han herido de muerte al gigante nevado Huaytapallana y el milagro de que se recupere está muy lejos.
Estudios hechos por el Consejo Nacional del Ambiente (Conam) señalan que desde 1990 hasta el año 2000 desaparecieron 54 metros de hielo, medidos desde la línea base del nevado original. En los últimos años no se ha hecho una nueva medición, pero solo es necesario levantar los ojos hacia la montaña y darse cuenta de su agonía.
La experta del Instituto de Investigaciones para el Desarrollo Tecnológico, Carmen Tazza Marín, asegura que los nevados como el Huaytapallana, con áreas pequeñas y ubicados debajo de los 5.500 metros sobre el nivel del mar desaparecerán antes del año 2015, si se mantienen las actuales condiciones climáticas.
Para el ingeniero Hernán López Cabrera, subgerente de gestión de medio ambiente de la región Junín, solo una autoridad autónoma puede garantizar el uso racional de los recursos hídricos en el ámbito nacional.
Una situación similar afronta el nevado Coropuna, en Arequipa. Este glacial, con cuyas aguas se irriga la pampa de Majes, se ha reducido a la mitad en las últimas cinco décadas. Un reporte de la BBC de Londres señala que toda la masa de hielo derretida desde 1970 equivale aproximadamente a siete mil millones de metros cúbicos de agua: el consumo del líquido en Lima durante diez años.
La Unidad de Glaciología y Recursos Hídricos del Instituto Nacional de Recursos Naturales (Inrena) vigila los nevados de la Cordillera Blanca, en Áncash, el glacial Sulcón, en la Cordillera Central, y el Vilcabamba, en el Cusco. El jefe de esa unidad, Marco Zapata, sostiene que entre 1948 y 1966 el retroceso de los glaciares era en promedio de ocho metros por año, pero que durante los últimos 30 años, el retroceso está por encima de los 20 metros anuales. Nuestro nevado emblemático, el Pastoruri, en Huaraz, ha perdido el 38% de su área . Con este panorama el Perú deberá olvidarse de sus cumbres nevadas.